Actualmente las empresas se encuentran inmersas en un entorno turbulento, compuesto por múltiples fuerzas y eventos que tarde o temprano les afecta. En éste entorno, lo único constante es el cambio. Es un ambiente impredecible, complejo y poderoso que abarca compradores, proveedores, rivales, trabajadores, componentes económicos y sociales, por mencionar solamente algunos. Es ahí donde surge la pregunta: ¿Cómo las empresas de hoy en día pueden ser líderes en el mercado, teniendo en cuenta los intereses de cada uno de sus actores, manteniendo precios bajos pero con excelente calidad? En pocas palabras, ¿Cómo ser exitosos? Reducción de costos, estrategias de marketing, servicios post-ventas y mejoras en los canales de distribución hacen parte de la solución; pero el elemento más importante sin duda es: El pensamiento estratégico.

La estrategia, más que una obligación, es una necesidad actual; y debe ser vista como fuente de ventaja competitiva. Algunos creen que es una tarea muy sencilla pero hasta para el empresario más experimentado es una labor compleja. La estrategia implica muchas cosas, entre las que podemos destacar: Conocer el entorno y visualizar cómo puede afectar a la empresa; identificar oportunidades y amenazas; superar las barreras del mercado; analizar a la competencia y sobresalir más que ella; organización y lógica. Es por esto que la estrategia se constituye en el pilar de los negocios; es la fórmula para enfrentarse a las fuerzas localizadas en el entorno y resultar triunfadores.

La construcción de una estrategia requiere varios elementos. Primero que todo, es necesario tener una visión; se refiere a una imagen futura de la empresa, ¿A dónde queremos llegar?; representa una guía para el equipo de trabajo y una razón para luchar. Segundo, se requiere la estrategia como tal; ¿De qué manera alcanzaremos nuestra visión? Esto hace referencia al conjunto de acciones que se deben implementar y a los recursos que son necesarios. Se necesita una planificación y una descripción de objetivos, que guíen el proceso. Por último, ¿Cómo mantenernos en el mercado? Muchas empresas visualizan, crean estrategias y las planean, pero no tienen en cuenta éste último factor, que es necesario para mantener el foco y crecer organizadamente.
Para concluir, hoy en día no es suficiente hacer negocios de la manera habitual; de ahí que una buena estrategia y una buena visión juegan un papel importante para generar cambios significativos. Dadas las crecientes demandas del entorno, es necesaria la creación de estrategias que respondan a éstos requerimientos. Desde luego, las estrategias deben estar acompañadas de una visión clara y ambas deben apuntar a la competitividad, llegando a ser motores del desarrollo empresarial.
No comments:
Post a Comment